Extintores, nueva visión

Vamos por una cultura hacia la prevención y acciones para mejorar la seguridad de nuestras áreas de trabajo, casa, escuelas, etc.

viernes, 3 de junio de 2011

Checar el extintor antes, durante y después…

Muchas veces en las revisiones que hemos realizado con los clientes, vemos que sus extintores se ven limpios, bien identificados y en áreas que realmente se puedan usar, pero NO tienen presión en su interior, ya que al acercarnos vemos la aguja del manómetro en cero. Me gustaría hacer una reflexión al respecto, ya que tenemos siempre una idea de que al ver el extintor limpio y colgado pasa por nuestro control diario o semanal como todo bien y bajo control.
La verdad es que es muy frecuente esta situación, por lo que debemos de hacer una cultura de constancia diaria de revisión por nosotros, y no encargárselos solamente a los vigilantes o a la comisión de seguridad en donde laboramos. Esta constancia debe de ser vista al igual de cómo nos ocurre con el cepillado de los dientes o el baño diario, ya que si no lo hacemos dentro de nuestra rutina, sentimos que algo nos falta. Cuando el jefe, director, dueño o cualquier persona hace esta revisión, ocurre un efecto de cascada, ya que TODOS nos iremos impregnando de este enfoque. Si cuando entramos a un sanitario público o privado, lo primero que vemos es si hay jabón y papel de baño, pues es lo que tenemos que lograr con cada uno de nosotros en la revisión de los extintores. Ojo, la revisión es visual y a veces sin parar de caminar, aunque lo ideal es una vez a la semana hacer una revisión más afondo. Al repetir esta situación una y otra vez, al final se vuelve costumbre y los nuevos empleados o nuestros hijos imitarán la misma rutina.
Aplica el mismo caso, sí se va a la carretera o a zonas distantes dentro de una ciudad. Revisen que el neumático tenga presión, y por supuesto, que el extintor este en su lugar y con presión.
Cuando seguimos una rutina diaria de pasar por las diferentes zonas del taller, oficina, escuela, casa, etc., revisando los extintores, abona a 1) UBICAR donde está el extintor, como un mapa mental que aún sin luz podemos llegar, 2) que el extintor tenga CARGA y PRESIÓN para accionar y apagar fuego, salvando vidas y 3) en caso de que el extintor se agote, ubicar de forma inmediata la siguiente zona con extintor. 4) cuando estemos en el fragor del incendio, con gritos, gente caída, humo y poca visibilidad, podremos en forma automática llegar al extintor y usarlo y por último, 5) el extintor funciona también como un ariete para abrir puertas… Créanme, funciona…
Todo esto también presiona no sólo a nuestra cadena de mando, amigos y/o familia a nivel interior, sino también al exterior, ya que suele ocurrir que algunas empresas no recargan con la presión y caducidad adecuada, así como, con la carga del extinguidor completa. Por lo que debemos de identificar y etiquetas a las empresas o personas deshonestas, ya que se escudan que por contrato cada 6 meses o al año de todos modos van a recargar nuevamente los extintores.
Saludos

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